Hace tres años que me casé con mi chico, con el que estuve durante 7 años de novios y con el que he compartido mis años de universidad, viajes, una hipoteca y mil momentos maravillosos.
Desde entonces me siento la persona mas afortunada del mundo. Desde que decidimos ampliar la familia han ocurrido un montón de cambios, sobretodo cuando nació nuestro peque. Yo me vi superada por el cansancio, los cólicos, la familia...y sin embargo el siempre fue mi punto de apoyo. Normalmente es un poco desastre en lo que se refiere a estar pendiente de las cosas, sin embargo, durante los primeros meses estaba constantemente pendiente de mi y del bebé y ahora está tan implicado en todo como lo puedo estar yo.
No entiendo los casos en los que van a por un bebé para ver si así arreglan la relación... pena me da la pobre criatura....
Basándome en mi experiencia, creo que es fundamental tener una buena relación de pareja a la hora de formar una familia porque se pueden vivir muchos momentos de tensión y desánimo.
Creo que cuando te ves superado, cansado, incluso deprimido, es necesario saber que puedes contar con una persona que te conozca, que te apoye aunque en esos momentos se te "vaya la pinza" y que te de la seguridad que necesitas, por eso me siento muy afortunada.
Esto es solamente el principio de la aventura, nos queda mucho camino por delante, muchos momentos buenos y no tan buenos pero sigo teniendo claro, tanto o mas que hace tres años, que quiero seguir viviéndolos junto a el.
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